Reparto del botín de Urania

Citación :

NOTA DEL NARRADOR:

En este hilo de discusión voy a poner los objetos/peones/dineros de Urania a repartir cuando llegáis a Issos:

Me gustaría que tuviérais MUY PRESENTE:
1.- que los únicos magos en el reparto son Horatius, Caesar, Sartorius, Diomedes, Nixiria y Octavio.
2.- que los custos participantes "esperan" recompensa (al menos los que no son "autómatas").

Libros:
Los libros dañados pueden ser restaurados si alguien con las artes abiertas y profesión "Escriba" dedica una estación en cada uno. Le dará una calidad máxima igual a 6+Comunicación, mientras no supere la calidad inicial. Los libros destruidos son irrecuperables.
-Summa de Creo N:10 Q: 9
-Summa de Terram N:10 Q: 4 (Dañado Q inicial: 9)
-Summa de Mentem N: 8 Q: 3 (Dañado Q inicial: 7)
-Summa de Rego N: 9 Q: 3 (Dañado Q inicial: 7)
-Summa de Arabe N: 3 Q: 8
-Summa de Vim N: 15 Q: 9
-Summa de Con. Persia N: 3 Q: 7
-Summa de Herbam N: 12 Q: 3 (Dañado 7)
-Summa de Mentem N: 11 Q: 3 (Dañado Q inicial: 7)
-Tractatus de Mu Q: 12 Escrito por Tremere
-Tractatus de Conocimiento Mágico Q: 5 (Dañado Q inicial: 9)

Textos de Laboratorio:
-Funda de cuero con Hechizos de Ulises de Bonisagus (Destruido)
-"Mentem Necronomicorum" (Destruido)
-"Corpus Necronomicorum":
---Polvo al Polvo (PeCo 15)
---El muerto andante (ReCoMe 35)
---El caminante diario (ReCoMe 25) Igual que El muerto andante pero Solar
---Carne incorrupta (CrCo 10)
-"De muerte a Vida":
---El sirviente incansable ReCo 29 (Objeto mágico)
---El caballero caido ReCoMe 29 (Objeto mágico)
-“Minoris Magicorum Gnomos” de Ulises de Bonisagus:
---Sentir el poder del aura (InVi15): Indica el tipo de aura imperante donde se lanza (mágico/divino/faérico/infernal), así como su nivel.
---Indagar la naturaleza del Vis (InVi15): Indica el tipo de peones de vis en una fuente, criatura, objeto o montón de vis; así como su cantidad.
---Aprehender la Esencia de la Magia (ReVi15): Para extraer vis de una fuente o criatura.
---Penetrar el Velo Mágico (InVi20): Permite encontrar el camino que conecta entre los niveles de un regio mágico, y por tanto profundizar en él o salir.
-“Maioris Magicorum Gnomos” de Ulises de Bonisagus (Destruido... Lástima que el que sobrevivió era el "Minoris")
-“Radica Mundis” de Ulises de Bonisagus:
--- Roca de Arcilla Viscosa (MuTe15): Para ablandar un piedrolo.
--- Sentir los Pasos en la Tierra (InTe30): Pues eso, sentir lo que está en contacto con la tierra.
--- Conjurar la Torre Mística (CrTe60): Como el hechizo de nivel 35, pero éste podría servir para conjurar una torre mucho más grande (¿como la primera de Urania?)
--- El Portal de Hermes (ReTe75): Adivinad para qué sirve.
-“Corporem Status Quaestiones” de Ulises de Bonisagus (Destruido)


Objetos Mágicos:
- Bastón de Bonisagus (Destruido)
- Capa Diedne
- Botas Diedne (creo recordar que eran para TAM -1)
- Corona de Ulises de Bonisagus
- Mandil de Cuero (Destruido)
- Túnica de Bonisagus
- Túnica de Diedne
- Plumín de plata del Escriba (Destruido)
- Medallón de Diedne (Destruido)
- Corona de Madera del Diedne
- 2 Medallones Ad Auctoritas Ex Libris
- Cuerda mágica (Ricardo El Caballero, que fue quien la cogió, insiste en quedarse con ella)
- Anillo de Tempesta (Destruido)
- Cubo de obsidiana de la despensa de Urania
- Antiparras rotas (Destruido)
- Armadura de piel humana rota (de momento lo custodia Octavio)
- Espada de Telémaco (de momento la custodia Octavio)
- Espada Afilada con "El Filo del escalplo" (Destruido)
- Maza de Tempesta "Exterminadora de Tremeres"
- Anillo de Telemaco (es su sigil-no es mágico)
- Bastón del Bjornaer (es su sigil-no es mágico)
- Brazalete de Criamon (es su sigil-no es mágico)

Peones:
56 peones + 5 peones "azules" del límite del regio divino.

Dinero:
284 Dinares
Objetos mundanos pequeños y diversos por valor de 389 dinares.


LOS NARRADORES TIENEN QUE DISCUTIR SI LOS SIGUIENTES OBJETOS ESTÁN O NO (tienen dudas sobre lo que os llevasteis):
-El ent (Destruido)
-La voz verde:
---The Bountiful Feast (CrHe 35)
---Hablar con las plantas (InHe 25)
---Stir the Slumbering Tree (MuHeMe 25)
---Calling the council of trees (ReInHe 45)
- Maceta mágica del Diedne

Caesar se abalanza rápidamente al montón después de que Horatius lea toda la lista y comienza a toquetear e incluso lamer algunos objetos.

"Queridos, ¡QUERIDOS!, creo que es el mayor botín que han visto mis ojos." - Murmura mientras parece buscar algo que sea de su talla.

Horatius carraspea, y Caesar, que trataba de probarse una túnica vuelve a la mesa, donde observa con una sonrisa a todos los presentes.

"Vamos hermanos, la ansia os corroe puedo sentirla". El joven mago gira sus ojos hacia la regia postura del Tremere que parece esperar a que Nixiria Lux, atenta como nunca con una viveza indescriptible en sus ojos comience a hablar. Horatius parece estar haciendo números y cuentas sobre un papel. Diomedes distraido observa un libro sin tener ni la mirada en él. Entre tanto, en el lugar mas alejado de la sala Sartorius mantiene el silencio y sus ojos observan la escena.

Caesar lanza una melosa voz hacia Nixiria Lux, "¿Que es lo que ansía la Cataphracta?, dómina" - Sus ojos y sonrisa se cruzan con los de Octavio.

Citación :

En la distancia, más allá de lo que la imaginación pudiera recorrer con sus infinitas zancadas, Dymas Argeos Ex Verditius se lleva las manos a la cabeza, como padeciendo alguna inquietud insoportable. Harpax Caecus ex Tytalus, convertido en médico de los heridos que han tenido que retrasar su regreso, se apresura a preguntarle:

- ¿Os asedia el dolor de vuestras heridas, sodale?

- No -, es la tajante respuesta del Verditius -... Es una sensación extraña... Como si nos estuviéramos perdiendo algo importante.

-¡¡¡Valerosos!!!... ¡¡¡Hurra!!!

Los gritos de un gran tumulto parecen provenir desde el exterior de la humilde cabaña donde tan suculento reparto está teniendo lugar.

Cuando Horatius ex Gernicus, extrañado, abre la puerta del chamizo, observa a una copiosa multitud de casi medio centenar de personas. En su centro, dos de los custos que han participado en la exploración de Urania han aupado sobre sus hombros al loable Vincenzo di Ancona, que se dirige a la congregación formada con valerosas palabras con objeto de enardecer sus corazones:

- ¡...Y entonces fue cuando Caesar ex Mercere, el hijo de nuestro sabio aun cuando extraño Arconte, anunció su idea de que la bestia sólo podía ser atraída por la violencia y la hostilidad de los visitantes; y poco después se aproximó en solitario hasta los pozos que servían de morada a la criatura, infundiendo de nuevo la llama del valor en nuestros corazones!

Las voces de júbilo del populacho reunido no tardan en levantarse hacia los cielos, junto con algunos sombreros:

-¡¡¡Bravo!!!... ¡¡¡Viva el joven Caesar!!!

Vincenzo levanta las manos, imponiendo el silencio, y luego continúa:

-De no ser por los valientes sabios de Issos, punta de lanza y primeros en todas y cada una de las acciones, ninguno habríamos sido capaces de escapar de allí con vida.

-¡¡¡Vivan los magos!!!... ¡¡¡Viva Issos!!!

-Siempre leales, sus hombres estuvimos con ellos en todo momento, siendo su escudo y su sombra al mismo tiempo. ¡Nobles y valerosos, nada pudo con nuestra impertérrita fidelidad!, merced a la cual, el propio Caesar me ha prometido prolija recompensa para cuantos acompañamos a los sabios hasta Urania... ¡Y un gran festejo con los mayores fastos para toda la Alianza!

- ¡¡¡Hurra!!!... ¡¡¡Hurra!!!... ¡¡¡Hurra!!!

Ensordecido por los vítores y las proclamas, Horatius ya parece haber escuchado bastante, así que cierra la puerta y la discusión prosigue.

Caesar se acerca sonriente al sorprendido Horatius.

"Tranquilo Guernicus" -dice en voz clara.- "Solo me he asegurado que 30 de nuestros fervorosos combatientes nos esperen fuera mientras negociamos".

La sonrisa de Caesar se hace mas evidente y mira el montón de libros y objetos.

"Bien, dado que no os resolvéis a hablar creo que lo mejor será empezar. Dado que Horatius ha sido tan generoso con vuestras mercedes, creo que el reparto se ejercerá de la siguiente forma. Issos seleccionará la mitad de objetos y libros en condiciones que desea, el resto será para Cataphractus." Los ojos de Caesar oscilan de Horatius a Nixiria Lux "Como deferencia, os dejaremos escoger los peones que os corresponde en primer lugar."

Caesar se gira a sus sodales y continua.

"Bien, creo que este Tribunal debería votar mi propuesta para determinar con cuantos sigiles se acepta. Horatius, vos sois el praeco en esta situación, esta es nuestra Alianza y vos el de mayor rango."

Citación :

Antes que prosigais, me falta una summa de Herbam de la diedne, la rescato Hermogenes de la destruccion de la torre, por lo que deberia de estar con el resto de libros recuperados. Tb me falta algun que otro objeto.

En cuanto a la lista de cosas de las que no se conoce el destino exacto:

- De la summa de Re N14 no sé nada. Si es una de las cosas que se hallaron en el Sancta de la Tytalus, entiendo que Octavio la llevó consigo.
- Echo en falta una Summa hallada en el sancta Diedne de He N12 Q7 P5 (3 Volúmenes) que sí nos llevamos (no es que me importe una higa).
- La maceta se vino con nosotros
- También DOS volúmenes de hechizos, de igual procedencia. Uno de P2 y otro de P1.
- Había una túnica Diedne con todo aquello. No sé si es lo mismo que la capa o si ésta se encontró en la sala del consejo.

Tenía que ser el Mentem Necronomicorum uno de los destruidos... dita sea

Horatius se levantó, solemne, para exponer la propuesta.
Era consciente de que se hallaban ante una situación comprometida que podía desembocar en disputas y argumentos sin fin. Tristemente acostumbrado a ello, sin embargo, se dispuso a hablar.

"Sodales, la propuesta de Caesar puede parecer un tanto expeditiva y descarnada. Sin embargo me veo inclinado a apoyarla y a proponer su votación en base a los argumentos que paso a exponer."

Su mirada se paró un instante sobre los soldales de Catafractus. Nixiria le miraba con los ojos encendidos mas, ninguna emoción transmitieron ni su semblante ni sus gestos.

"En primer lugar quiero destacar que este reparto no es tal, sino que se trata de una asignación de custodia temporal. Ambas alianzas tienen un compromiso firmado sobre un reparto equitativo una vez se haya determinado la naturaleza de los objetos en cuestión. Hasta entonces, los custodios de los objetos se comprometen a analizar la naturaleza y poder de los mismos de la forma más eficiente posible."

"No pondré sobre el tapete la cuestión de la asimetría de los recursos empeñados en este empresa, pues creo que ambas alianzas han invertido interés, esfuerzo y sacrifícios en la búsqueda. Sin embargo, sí quiero hacer hincapié en una cuestión de índole práctica. Tampoco quiero hacer valer la generosa oferta que hice a nuestros sodales tras el ataque Akashico pues es el reparto final el que zanjará toda la cuestión."

El discurso de Horatius iba acelerándose por momentos. Parecía prepararse a las objeciones que, probablemente, iban a estallar en breve.

"La desgraciada muerte de Hermógenes ha privado a nuestros sodales se un extraordinario investigador. Por nuestro lado, tanto Dymas (quien en su inagotable actividad, se cree el único capaz de ejecutar las artes de Intellego requeridas) como yo mismo, estamos capacitados para realizar las requeridas investigaciones a la mayor brevedad y con la mayor eficiencia. Es por ello que someto la propuesta a votación y presento mi sigil como voto a favor."

Diomedes carraspea levemente y se levanta, haciendose notar por primera vez en la conversación. Claramente se muestra un poco incómodo al convertirse, de repente, en el centro de todas las miradas.

"En aras de una resolución rápida y expeditiva del lo que, dados los precedentes, hay que preveer como una nueva y agotadora discusión sobre el reparto del botín, y plenamente convencido por la argumentación del sodale Horatius, presento mi sigil como voto, apoyando la propuesta de nuestro sodale Caesar"

Tras estas palabras Diomedes se vuelve a sentar, encogiéndose ligeramente en su silla, tratando de volver nuevamente a un segundo plano que le haga pasar un poco más desapercibido...

Citación :

Saludos a todos.

Creo que se está confundiendo el sentido y la utilidad que puede tener el foro para resolver una situación como esta. El foro solo está para narrar, para interpretar y para que los personajes puedan interactuar unos con otros profundizando un poco más en sus personalidades, motivaciones y relaciones mutuas, pero no puede utilizarse para resolver una situación de tensión que requeriría estar en la mesa y lanzar dados.

Pongo un ejemplo de los muchos que se me ocurren pero bastante sencillo (el más suave) Mientras los magos siguen discutiendo sobre lo que ellos creen legítimo decidir Octavio recoge las cosas que le gustan, ¡casi todo! Las mete en un saco y se sienta sobre ellas como una gallina clueca negándose a aceptar ninguna decisión ¿Cómo se las quitáis sin agredirle y por lo tanto tener que lanzar dados?

Yo propongo lo siguiente… si queréis se discute por interpretar, aunque veo claro que no se llegará a ningún acuerdo pero para resolver el reparto sólo hay tres opciones (una vez se decida lo que hay y lo que no hay):

A) Os bajáis a Madrid que tenéis sitio donde quedaros y lo resolvemos en mesa (porque yo subí a Santander para el cumple de mi madre pero tardaré en volver a subir)

B) Damos una lista de nuestras preferencias a los narradores y aproximadamente, y basándose en ellas, los narradores presentan un reparto. Luego podemos acordar nuevos cambios por permuta. (a mi este es el que mas me gusta).

C) Como propuso Sartorius Agripa, un bando hace dos montones y el otro bando elige su montón.

Quizá algunos penséis que efectivamente lo que se estaba haciendo en este hilo ya era simplemente interpretar, pero es que yo ya tengo experiencia de un hilo así en este mismo foro que empezó de modo similar y terminó con una resolución que requeriría haber sido jugada en mesa pero nunca se hizo.

"Yo también voto a favor."

Caesar sonrió, y se fijó en los encendidos ojos de los sodales de Cataphractus.
Dirigió sus pasos a la puerta, la abrió y 4 hombres con armadura vestida y espadas en sus cintos entraron por la puerta.

Caesar se giró a Horatius.

"¿Que libros y objetos ha de custodiar Issos, Administrorum?, estos hombres lo llevarán a lugar seguro."

Citación :

Algunos pensareis que esto es una pataleta, y puedo ponerme en vuestro lugar y comprender vuestro sentir. Sin embargo, dado que yo ya he estado en ese lugar al que ahora os llevo, no puedo menos que hacerlo para que comprendáis por que digo que no se puede realizar un relato en el que se compita por el foro…

Octavio se rabiaba por dentro… si, lo hacia. Pero aún más se complacía ante la perspectiva de ver al cordero convertido de nuevo en lobo. Cuan fácil le había sido retirarse el disfraz, cuan pronto había jugado su última carta del engaño.

¡Que razón tenéis Cesarión! ¡Cuanta sabiduría en un becarium de quesitor! Sólo os ha faltado conservar la norma , maese Horatius: la norma de que un Guernicus nunca vota en un tribunal porque eso le haría perder su imparcialidad – Dijo Octavio sonriendo a Horatius al tiempo que agitaba el dedo en el aire de izquierda a derecha con gesto burlón.-Además… entre los presentes, yo sería el praeco por ser el mago de mayor edad y de mayor antigüedad en el tribunal.

Nixiria Lux que hasta este momento estaba observando la escena con cierta incredulidad, como si estuviese comprobando, midiendo y juzgando hasta donde la avaricia podía llevar a los magos de Issos, dio un paso hacia delante.

-Cuesta dar crédito a lo que estoy viendo… Un Mercere revolcándose por el suelo y lamiendo cosas cual una mosca en un montón de excrementos… Un Guernicus que pierde la razón y se olvida que los Quesitor no tienen voto en los tribunales…. ¿Pero qué tribunales? ¿Qué Tribunal es este? Me parece estupendo que votéis, pero solamente por lo que concierne los asuntos de vuestra Alianza. ¡No olvidéis! Somos dos Alianzas… si queréis votar, votad lo vuestro, y nosotros decidiremos lo nuestro. Nada tenéis para obligar a otra Alianza a respetar lo que se haya votado en vuestro “Tribunal” interno…

Las voz de la Flambeau adquirió un levísimo matiz melancólico y un tanto triste:

-¡Nobles magos de Hermes! ¡Con qué orgullo llevo este nombre y el honor de ser miembro de la Orden! Y cuan triste es el día, en el que los magos se olvidan de compostura y honradez, rebajándose a la vergonzosa miseria de un perro rabioso que atacaría al otro por un viejo hueso… ¡Ahora sacáis los dientes! ¡Tu Caeser! No me engañaste ni por un instante… ¡Siempre supe que debajo de tus empalagosas palabras se escondía una lengua de víbora! ¿Y vos Horatius? Tan equitativo y ecuánime en vuestras palabras… Ahora vemos claramente lo que vale el honor de un Guernicus… ¿Pero sabéis qué se dice a un perro rabioso? ¡¡¡Perro malo!!!

El azúl zafiro de los ojos de la Flambeau estaba más brillante que nunca y en las esquinas de las ventanas sobre los cristales se dibujaban diminutas flores de escharcha que centellaban contra la luz de las antorchas.

-Recuerda, Caeser…¡ lo que hizo el maestro, lo pagará el aprendiz!

Veamos veamos… -Octavio, puesto en pié empezó a dar vueltas alrededor del montón ordenado de incalculable valor, el animal, conocido como el reperio salto de su bolsillo y comenzo a recorrer las posesiones, deteniendose en alguna y apenas pasando sobre otras – Creo que es más que justo que os quedéis con… ¡Empecemos por los libros que seguramente es lo que más codiciais! Creo que esta magnífica summa de Ulises de Bonisagus que versa sobre la forma de Vim será vuestra primera reclamación, así que… ¡concedida! – diciendo esto introdujo los pesados tomos en uno de los sacos que se habían usado para acarrearlo todo – Los presentes le miraban unos con cara de incredulidad y otros con desconfianza… alguno hasta sonreía – Después estoy seguro de que demandaríais la summa de creo del mismo autor y por qué no, su libro que versa sobre la forma de Terram. Yo, si fuera vosotros, no renunciaría a la summa de Herbam de Fidelio de la casa maldita que el difunto Hermógenes cargó sobre su espalda corriendo a mi lado por el pasillo que se inundaba… por cierto… ¡hablando de a mi lado! Debeis quedaros con el tractatus de Tremere, eso seguro que me llenará de rabia y resentimiento hacia vosotros – Octavio extendió las palmas de las manos hacia arriba mirando alrededor mientras asentía con la cabeza buscando el apoyo de todos los presentes cuyo asombro no dejaba de ir en aumento – Creo que si nos dejáis el resto aún sois muy generosos… pero no dudo de vuestra generosidad. Veamos porque aún caben más cosas en el saco. ¿Qué os parece si os quedáis también con el grimorio de Muerte a Vida de Tempesta y el libro de “Radica Mundi” de Ulises de Bonisagus. Yo creo que sin duda son los mejores y debéis guardarlos vosotros. – Reperio ya había terminado de recorrer el montón y volvió a saltar sobre los brazos del Tremere - Prima Nixiria Lux… tened la bondad de cuidar de mi buen amigo – Diciendo esto tendió a Reperio a su sodale que lo recogió entre sus pequeñas manos.

Los peones…. ¡Creo que os debéis quedaros con todo ellos! Si si… con todos, a fin de cuentas que importancia tiene que Nixiria Lux aquí presente utilizará 8 peones para salvar la vida de Horatius y Marcelo del fuego! También… que importancia tiene que se extrajeran más de 108 peones tan solo de la sala de reuniones de Urania y que por alguna razón cuando Cesarión se quedó a solas con ellos se redujeran a tan solo 56. –Diciendo esto tendió la voluminosa bolsa a Nixiria Lux quien la recogió entre sus manos.

Mientras Octavio tomaba la justicia por su mano, y después de esconder al reperio y la bolsa de peones entre los pliegues de su capa, Nixiria Lux abandonó la sala cerrando la puerta tras de sí. Una vez fuera, observó a los hombres de Issos reunidos alrededor de la pequeña cabaña, como si estuviesen esperando órdenes para actuar. La maga ordenó a Pausanias y a Dionysios que vigilaran su espalda. Hizo unos sutiles gestos en el aire y murmulló unas palabras, tras las cuales, se dibujo una traslucida forma delante de la puerta que en pocos instantes cobró solidez y se convirtió en un gigantesco muro de hielo dejando atrapados a los reunidos dentro.

Un inquieto murmullo recorrió entre la muchedumbre… La Flambeau se dio la vuelta y con sus dos hombres y el Reperio, acurrucado en uno de los bolsillos de su capa, empezó a bajar la cuesta con intención de abandonar Issos sin echar ni una última mirada hacia atrás. De repente, una alta y corpulenta figura salió adelante, cortando el paso a la pequeña comitiva.

-¡Señora!- sonó la voz de Vinccenzo- ¡No puedo dejaros pasar! ¡Estas son mis órdenes! Si no os acompaña uno de mis señores, no podéis abandonar la Alianza.

Nixiria Lux clavó una gélida mirada en los ojos del custos:

-¡Apartate de mi camino!- Dionysios y Pausanias se preparaban para un enfrentamiento, pero como experiencia les había enseñado, a veces era mejor aguardar las ordenes de la aparentemente frágil maga, que intentó dar otro paso hacia delante.

Al darse cuenta, que los invitados no iban a obedecer su advertencia, Vinccenzo agarró a Nixiria Lux del brazo, pidiéndole disculpas y explicándo que seguía las ordenes.

El cautiverio de la Flambeau duró apenas unos instantes… Solo se oyó una palabra susurrada entre dientes que los más cercanos a la escena entendieron como ¡Necio!, y un grito de hombre que caía al suelo agarrándose del hombro.

Cuando el fiel sirviente de Issos aferró a la maga, ella apretó la mano de quien la apresaba, y en un santiamén, el brazo entero hasta el hombro se había convertido en una contínua herida, un miembro completamente inutilizado, congelado y rígido que se rompió en pequeños pedacitos dejando una herida abierta en el hombro.

Nada ni nadie más se atrevió acercarse a la Flambeau y sus hombres. Y los tres pronto desaparecieron en la oscuridad de la noche.

- Mientras, Octavio seguía con el reparto en el interior de la cabaña -

-Todavía no hemos comenzado a repartir los objetos mágicos…. ¿Qué os parece si reclamáis la corona de Ulises y la corona de Fidelio? A mi reperio y a mi son los que nos parece que irradian más magia – Continuo metiendo en un nuevo saco de arpillera puesto que el anterior ya estaba lleno. -La maza de Tempesta… no es tan poderosa pero seguro que no os resistís a la ocasión de dejarme sin ella. Además…qué menos que uno de los medallones de Ad Auctoritas Ex Libris y la túnica de Bonisagus… ¡Ah! Y por supuesto, que gusto os llevaríais de privar a los pies de Nixiria Lux de las botas de Diedne...

¡Bueno! Yo creo todo esto es justo y merecido por tan valientes, magnánimos y justos sodales – Diciendo esto se pasó la mano por la frente como si se secara el sudor por el cansancio. Así que como todo esto es muy justo…. Que así sea. – En ese momento Horatius se dio cuenta de que el Tremere acaba de finalizar un hechizo que seguramente había estado lanzando en silencio y sin realizar gestos y…. ¡Desapareció! Y con él los libros y objetos mágicos que había ido metiendo en los sacos de arpillera. Tras él, tan solo quedó la tierra del suelo de la cabaña, ordenada en armoniosos círculos concéntricos.

-FIN-

Citación :

Bueno....

Como veo que sois niños pequeños, no voy a castigaros como a adultos, sino como a niños.
Me voy a pensar cómo exactamente, pero huelga decir que por el momento ninguna de las 2 alianzas disfrutará de este magnífico botín. Entre Rubén y yo nos vamos a pensar si algún día llegáis a tocar todos los libros, peones y objetos destinados a adultos de los que, obviamente, vuestra mente infantil no puede aprovecharse.